Tres compañías trabajan a full para hacer realidad uno de los sueños de Julio Verne y presentar el primer propotipo del dispositivo en septiembre próximo.
Techodart dio a conocer en Praga las primeras imágenes en 3D de la iniaciativa, aunque reconoció que “carece aún de aplicación comercial, aunque tendrá en todo caso un vuelo corto y en condiciones seguras, dado que no tiene licencia para vuelo”.
La bicicleta, que pesará 85 kilos sin el conductor, se elevará a una altura máxima de cinco metros y desarrollará una 47 kilovatios y podrá desplazar en el aire una carga máxima de 170 kilos. Tiene 3,5 metros de largo, 2,5 metros de ancho y 1,2 metros de altura. Su tiempo aproximado de vuelo son de tres a cinco minutos y alcanzará una velocidad máxima de 50 kilómetros por hora.
Las empresas involucradas están probando “el marco de la bicicleta” y desde la próxima semana verificarán “el uso del regulador y la electrónica”.
Se espera que la bicicleta cuente con cuatro motores de 10 kilovatios, los que accionarán para dos pares de hélices de marcha contraria, delante y detrás del piloto, dispuestas en un plano longitudinal. Además, tendrá dos motores estabilizadores de 3,5 vatios en ambos lados.
Las hélices principales para la fuerza de tracción estática son de 1.300 milímetros, con 2.500 rotaciones por minuto, y las hélices de estabilización son de 650 milímetros.