Una inusual medida tomó el gobierno etíope, al considerar el uso de los servicios de telefonía IP, como las dos plataformas antes mencionadas, como un delito penado con 15 años de prisión.
La decisión gubernamental comenzó a regir el mes pasado, pero recién se hizo conocida en el mundo hace unas horas, por la cobertura que dio el canal de televisión árabe Al Jazeera al hecho.
Esta situación se da en un contexto bastante complejo para los internautas de Etiopía, ya que en dicho país existe sólo un proveedor de servicios de internet que es estatal, Ethio Telecom, el que ha estado limitando desde hace bastante tiempo el acceso a ciertos tipos de contenidos a los usuarios de la red.
El gobierno del país respalda la nueva ley que criminaliza el uso de estos servicios de telefonía a través de internet, como Skype y Google Talk, argumentando que “es por un asunto de seguridad nacional”.
Además, el ministro de Comunicaciones y Tecnologías de la Información afirmó que esa no es la única restricción que se está llevando a cabo en el africano país con respecto a las TICs, agregando que su ministerio tiene el poder de “supervisar y emitir las licencias de todas las compañías privadas que se dediquen a la importación de equipos utilizados para la comunicación de la información”, concluyó.
La medida adoptada por el gobierno además prohíbe cualquier tipo de transmisión de datos a través de audio o video, manteniendo las redes sociales lo más restringidas posible.
Quienes cometan el nuevo “delito” tipificado por la justicio etíope, arriesgan una larga pena: 15 años de cárcel, sólo por osar incurrir en alguna de estas faltas mencionadas.
Etiopía es uno de los países con menor penetración de internet. De los cerca de 82 millones de habitantes, sólo 700.000 personas cuentan con acceso a la red. Si consideramos las restricciones impuestas recientemente por el gobierno de ese país, los pronósticos para la libertad de información, expresión y el uso de internet no se ven muy alentadores.
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