La compañía finlandesa está en conversaciones “exploratorias” con operadoras europeas para compartir los ingresos de sus teléfonos con el SO móvil de Microsoft, a cambio de soporte exclusivo.
Este sería un cambio en el modus operandi normal de las telefónicas, las cuales buscan vender tantos dispositivos como se pueda a través de varias compañías a la vez, y seguiría el modelo interpuesto por Apple y AT&T en 2007 con el iPhone.
Así, Nokia busca generar el mismo nivel de entusiasmo por su smartphone con Windows Phone 8 que el conseguido en ese entonces por Apple y también mostrarse como una alternativa más rentable al que ofrecen los de Cupertino y Samsung.
Si bien se dice que operadoras como France Telecom (Orange) y Deutsche Telekom están involucradas, todas las partes han declinado comentar el hecho.
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