La tecnología 3D se ha tomado el mundo de la entretención y también de la medicina. Sí, porque ya no sólo sirve para ver películas más asombrosas o para estar en casa viendo la mejor calidad en la televisión, ni tampoco sólo para crear figuras de chocolate, sino que ahora tiene un fin al menos más loable y que tiene que ver con la ayuda a personas discapacitadas.
Se trata de una impresora 3D que creó a WREX, que es un exoesqueleto. Esto quiere decir que este dispositivo desarroló una especie de prótesis para niños que tienen problemas muscular o articulares en sus extremidades superiores y que tienen dificultad para cargar objetos, por ejemplo.
WREX en este caso se uniría al cuerpo al utilizar un conjunto de bandas de resistencia, junto con barras metálicas con el fin de entregar un soporte artificial. Lo importante de ese accionar es que permite que los niños con discapacidades puedan levantarse, caminar y llevar en sus brazos algún objeto que ellos quieran.
Actualmente, son 15 infantes con distintos tipos de enfermedades congénitas, quienes son beneficiados por los servicios de este exoesqueleto. Ahora, para presentar su funcionalidad, sus creadores desarrollaron un video que muestra como WREX es utilizado por Emma, una menor que sufre Antrogriposis – enfermedad que de nacimiento la llena de contracturas en sus extremidades y también luego en sus articulaciones-.
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