Thorsten Heins, CEO de Research in Motion, apuntó que la empresa baraja abrir su próximo sistema operativo a empresas como Samsung y Cony como parte de la estrategia para poder aumentar su capitalización y su cuota de mercado en el mundo de los smartphones.
Y es que el panorama se muestra negativo para la empresa canadiense, que suma una fuerte caída en las ventas de BlackBerry, a lo que se suma el retraso en la llegada de su SO BlackBerry 10, sindicado como “el salvador” de la empresa.
Además, los despidos de su planta ya suman 2.000 personas, el 11% de sus empleados, y se espera que estas cifras sigan en aumento durante el mes de agosto.
Pero Thorsten Heins aseguró que fabricantes como Sony o Samsung podrían obtener licencias para utilizar el nuevo sistema operativo, BB 10, en sus dispositivos.
Según Heins, la canadiense se centraría en desarrollar el sistema BB 10 como un “sistema operativo de referencia” y después otorgaría licencias para que otros fabricantes lo incorporen en sus smartphones.
“No tenemos una economía a escala para competir contra los chicos que fabrican 60 aparatos al año. Tenemos que diferenciar y tener una plataforma definida”, asegura Heins.
Además, asegura que también es necesario tener en cuenta el crecimiento que ya ha experimentado RIM. “Si nos fijamos en la plataforma esta sigue creciendo y si nos fijamos en los dispositivos, un único teléfono ha conseguido 45 millones de unidades”.