La fabricante de hardware se encuentra bajo la lupa, luego que se denunciara que su filial dedicada al ensamblaje de iPhones de Apple fuera denunciara por “obligar” a estudiantes a trabajar en la línea de producción, algo que la empresa niega.
Foxconn reconoció que se pueden encontrar “pasantes” en las líneas de montaje, pero son libres de irse cuando quieran. Al mismo tiempo, los representantes de la organización China Labor Watch hablaron con los alumnos quienes indicaron que son instados a trabajar ahí por sus maestros.
Li Qiang, fundador del Observatorio de Trabajo Infantil, dice que los estudiantes de formación profesional dedican tiempo a Foxconn para aprender, no para trabajar. Sin embargo, a los estudiantes se les dice que no se graduarán a menos que trabajen.
Un representante de Foxconn dijo a The Times que los internos representan el 2,7% de la fuerza laboral de su empresa en China, todos los cuales son contratados “bajo la supervisión del gobierno local y las escuelas también asignar profesores para acompañar y supervisar a los estudiantes a través de sus prácticas”.
El año pasado, la Asociación para el Trabajo Justo trabajó estrechamente con Apple para investigar y asegurar condiciones justas de trabajo en las fábricas de Foxconn en China.
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