Un estudio realizado por miembros de la Universidad de Finlandia Oriental concluyó que los hombres que consumen una dieta en la cual el tomate es un actor importante tienen menos probabilidades de sufrir un derrame cerebral.
El análisis contó con la participación de más de mil hombre mayores de 45 años, en los que se observó que los que tenían niveles más altos en sangre de licopeno -un antioxidante que pertenece a la familia de los carotenoides – tenían menos probabilidades de tener un accidente cerebrovascular.
El licopeno es un “potente antioxidante”, afirma el investigador principal, Jouni Karppi, quien destacó que ayuda a proteger las células del cuerpo contra el daño que a la larga puede conducir a la enfermedad.
La investigación también sugiere que el licopeno ayuda a combatir la inflamación y los coágulos de sangre, y pueden ser mejores que otros antioxidantes.
El licopeno es una sustancia química que da un tono rojizo a los alimentos como los tomates, pimientos, sandía y papaya. Para la mayoría de la gente, los tomates y sus productos derivados son, con mucho, la mayor fuente de licopeno en la dieta.
Sin embargo, otros investigadores indicaron que este estudio no prueba que los tomates por sí solos pueden reducir el riesgo de accidente cerebrovascular, ya que consideran que puede haber otros factores que podrían explicar las probabilidades más bajas de sufrir un derrame cerebral.
“Estudios como éste son interesantes, pero tienen limitaciones significativas”, señaló Larry Goldstein, director del Centro de Stroke Duke y profesor de la Duke University Medical Center de EEUU, quien entiende que las conclusiones de la investigación vienen a corroborar “las recomendaciones actuales para mucha gente a tener una dieta bien variada, con frutas y verduras”.