La versión 2.3 del popular sistema operativo móvil de Google está presente en el 56% de los dispositivos Android, seguido de IcreCream Sandwich con el 23,7%. Por su parte, la última actualización, Jelly Bean, sólo representa el 1,8%.
La situación de Android 4.1 es interesante, ya que incluso es superada por el anticuado Android 2.2 -Froyo- que posee el 12,9% de participación en el mercado.
Que Gingerbread siga siendo dominante en el espacio Android es bastante sorprendente, teniendo en cuenta que el sistema operativo entró en escena móvil en diciembre de 2010. Sin embargo, su cuota de mercado está disminuyendo: a principios de septiembre, su cuota se situó en el 57,5%.
Los desarrolladores de Android han crecido acostumbrados a alojar tantas versiones diferentes. Con los años, los últimos y mejores dispositivos Android ejecutar la versión más reciente, pero los dispositivos heredados son lentos para recibir las actualizaciones.
En otros casos, los dispositivos más antiguos no reciben las actualizaciones del software nuevo en absoluto, dejando a los usuarios atrapados. No está claro si, o cómo, esa tendencia podría cambiar.
Los datos sobre el mercado Android se recogió en función del número de dispositivos con el sistema operativo que accede a Google Play durante un período de 14 días que terminó el 1 de octubre.
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