La mayoría de los detalles ya se habían conocido gracias a muchas avalanchas de filtraciones, pero aún así tenían sorpresas bajo la manga. Primero anunciaron que dejaron de llamarse RIM para ser simplemente BlackBerry, luego confirmaron el arribo de la BBZ10 y la BBQ10, las aplicaciones que estarían en la BlackBerry World y finalmente también su disponibilidad en el resto del mundo.
¿Pero qué más? La verdad no mucho, pues a simple análisis, podría decirse que BlackBerry apostó y lo hizo bien, pero no lo suficientemente bien como para ser realmente novedosos, sino que más bien lanzaron un OS con nuevos terminales que sólo se equiparan en alguna medida con los grandes competidores del mercado.
No hay colores – por el momento-, los íconos son similares a los ya vistos, y la carcasa de la Z10 incluso se parece al iPhone. Su grosor es normal y el material utilizado tampoco es el peor pero menos el mejor. Ahora, en cuanto a diseño, se agradece que mantengan sus política de elegancia corporativa, pero también se extraña algo más de innovación.
Y sí, hay aspectos que pueden aplaudirse, como lo son la incorporación nativa de Dropbox y Evernote. De hecho, lo mejor de todo está en su interfaz, en su interior, pues el modo personal y el “tipo laboral” que implementan es una característica no vista en los competidores, más bien es sólo digna de una empresa que siempre se fijó mucho en el ámbito corporativo.
En cuanto a las aplicaciones, simplemente es positivo que estén las más exitosas y populares de los demás sistemas operativos móviles, pero en lo que se refiere a su usabilidad, la nota es 7, porque para saltar de una aplicación a otra no es necesario volver a la pantalla de inicio, sino que con un simple gesto del dedo que se deslizará hacia arriba, se podrán desplegar todas las apps.
La cámara fotográfica de 8 megapíxeles es normal y tampoco tenía que ser la mejor, pero frente a un Lumia, por ejemplo, deja mucho que desear, sobre todo si lo que quieren es recuperar el terreno que acaparó Nokia al adelantarse a ellos.
Ahora, lo que sí hicieron bien, es lanzar dos versiones de sus terminales, uno para los vanguardistas y otro para los clásicos que siguen amando el teclado físico Full QWERTY, porque así dan pistas de que siguen avanzando pero con sus bases sólidas de siempre.
Finalmente, cabe destacar que este es un análisis somero, pues falta lo más importante que es probar los terminales y el sistema operativo, para concluir justificadamente sobre esta nueva apuesta de BlackBerry. Mientras tanto, sólo queda recordar que la BBZ10 llegará en marzo a Venezuela y Colombia y se espera que también al resto de los países de Latinoamérica.