Siempre se pensó en la relación entre la luz solar y el menor riesgo de contraer esta enfermedad, pero ahora la Revista Annals of the Rheumatic Diseases publicó un estudio que lo confirmaría.
Se trata específicamente de una investigación que reunió a más de 200 mil mujeres, ya que en ellas es mucho más común el desarrollo de la enfermedad. El procedimiento de estudio se realizó tras separarlas en dos grupos de 100 mil, uno de ellos fue investigado desde 1976 y luego el otro desde 1989, para luego analizar sus niveles de UV-B en relación con el lugar donde vivían.
El resultado fue que la mujeres que vivieron en regiones con más luz solar de Estados Unidos, efectivamente tenían menos riesgo de desarrollar la artritis reumatoide, de hecho el porcentaje es de un 21% de probalidades menos que quienes vivían en zonas que pasaban más nubladas, por ejemplo.
Ahora, también hay un grupo de mujeres que no se benefició para nada de vivir en zonas geográficas más soleadas, lanzando una teoría que explicaría tal situación y que tiene que ver con que hay factores como el uso de bloqueadores solares que podrían haber afectado la penetración positiva de los rayos del sol.
En cuanto a por qué las mujeres que viven en lugares con más luz de sol tienen menos posibilidades de desarrollar artritis reumatoide, los científicos explicaron que todo estaría en la presencia de vitamina D que se produce cuando los rayos UV tocan la piel. Es decir, a menor nivel de vitamina D, más probabilidad de artritis, tal como ocurre con la esclerosis múltiple.
Cabe destacar que el beneficio de estos estudios es el de encontrar nuevos mecanismos que ayuden a frenar la incapacidad que produce la enfermedad y no necesariamente llamar a las mujeres a exponerse permanentemente al sol, pues también los rayos UV-B queman y aumentan el riesgo de cáncer.
Más información en BBC