En una época en la que la Tierra estaba habitada por dinosaurios y grandes reptiles, también existían insectos de grandes proporciones. Las pulgas gigantes mostraban unas características similares a las actuales donde destacaba una trompa para succionar la sangre de los dinosaurios. La desaparición de estos podría haber sido la causa de la reducción del tamaño de estas pulgas.
Es de sobra conocido el enorme tamaño de los diferentes animales en la época del Jurásico. Lo que no sabíamos es que también existían pulgas gigantes que succionaban la sangre de los dinosaurios para poder sobrevivir. Su tamaño hoy daría pánico y es que éstas llegaron a medir en el caso de las hembras entre 14 y20,6 milímetrosy en el de los machos entre 8 y14,7 milímetros. Estas medidas contrastan con las de las pulgas actuales, que oscilan entre 0,8 y5 milímetros, y miden de media3,5 milímetros.
Tal hallazgo ha sido descubierto por el equipo de André Nel, entomólogo del Museo de Historia Natural de París. Estos espectaculares fósiles han sido hallados en las provincias chinas de Daohugou, Mongolia Interior y Liaoning y datan de dos épocas diferentes, el Jurásico medio (hace 165 millones de años) y del Cretácico inferior (entre 145 y 99 millones de años).
Pero, ¿tenían una fisonomía diferente a las actuales pulgas? En parte sí. Su abdomen era largo y ancho, la cabeza era pequeña y sus patas largas. Eso si, carecían de alas como las actuales. Se caracterizaban sobre todo por una “trompa” de importantes dimensiones, con forma de sifón y que era mucho más amplia en las hembras, las de mayor tamaño. En contraposición con las actuales, tenían unas patas traseras no aptas para saltar.
Estas características encontradas en los fósiles a puesto de manifiesto que éstas evolucionaron a partir de la mosca escorpión, una especie alada que habitó en el Cretácico inferior y que se extinguió con la aparición de insectos modernos como los mosquitos o las hormigas. Con motivo de la adaptación, las pulgas perdieron sus alas y disminuyó el tamaño de su antena y de sus ojos.
“El gran tamaño de estas pulgas en comparación con las modernas indica que en un primer momento no debieron alimentarse de pequeños mamíferos, sino de grandes dinosaurios con plumas. A medida que estos grandes dinosaurios se extinguieron, desaparecieron también las pulgas gigantes”, ha indicado Nel. Sin embargo el motivo de la reducción de su tamaño aún sigue siendo un misterio sin resolver.
Fuente: EFE