La impresión en tercera dimensión está abriendo múltiples posibilidades en la fabricación de distintos productos, así como a la reproducción de otros, motivo por el que algunos ya está intentando poner obstáculos para que esto no siga así en el futuro.
Se trata de una patente DRM que vendría a establecer un uso restrictivo de la impresión en tercera dimensión, con el fin de que, por ejemplo, no se de paso a las copias ilegítimas de ciertas fabricaciones. Es que esta tecnología de impresión en 3D es tan revolucionaria, que incluso comenzarán a utilizarla en el espacio cuando los astronautas necesiten repuestos.
Esto es posible ya que gracias a la impresión 3D los costos de producción se reducen y basta sólo con un CAD para poder imprimir lo que se desee, idea que por supuesto no le gusta a todos, menos a las superpotencias ni a los que está preocupados de los derechos de autor, motivo por el que quisieron patentar la DRM para aplicarla antes de que se lleve a cabo la impresión.
Esto significa que cada vez que alguien quiera reproducir una pieza – como una obra de arte, por ejemplo- o producto en la impresora en 3D, deberá tener una firma digital o una denominada autorización electrónica, de lo contrario nunca podrá imprimir. Por el momento eso sí, esta es sólo una patente potencialmente restrictiva y sólo habrá que ver si es que finalmente se comienza a utilizar, aunque es de esperar que no.
Vía Torrent Freak