El líquido denominado Novec 1230 o fluorocetona marca un antes y un después en la forma en que se combatirá el fuego, ya que no daña a los aparatos electrónicos con los que hace contacto, aunque estén en pleno funcionamiento.
Entre sus características se encuentra que no conduce electricidad, es frío al tacto y se seca 50 veces más rápido que el agua.
Sus desarrolladores explicaron que es un gas que se almacena en forma líquida y que ante un eventual incendio, el líquido se expande en la cantidad exacta para inundar en 10 segundos el área afectada por el fuego.
“El fuego requiere de tres condiciones: calor, combustible y oxígeno, y para poder controlarlo nosotros quitamos el calor”, explica Eurídice Ibarlucea, especialista del producto en Latinoamérica.
Otro elemento importante de su conformación es que no contiene productos tóxicos y una cantidad mínima de carbono. Junto con ello, su contacto con la piel o ingestión no causa daños al ser humano.