Investigadores de la Universidad Carlos III lograron crear en un laboratorio una ola eterna, que tiene la capacidad de mantenerse sin avanzar ni deshacerse por el tiempo que se estime conveniente.
Esto se logró gracias a un novedoso sistema de paneles que dirigen el agua de determinadas maneras para crear la ola sin que se mueva ni amaine.
“Al permanecer la ola congelada en el tiempo podemos emplear técnicas experimentales para medirla y caracterizarla que no es posible utilizar en olas naturales”, explicó Javier Rodríguez, uno de los científicos responsables de este adelanto, que se desarrolló a petición de a Marina de Estados Unidos.
El sistema nación con la intención de estudiar detalladamente las estelas que dejan los barcos, permitirá además, estudiar en detalle las zonas impacto de las olas tubo y el intercambio de oxígeno con el medioambiente en el momento de que una de estas ondas de agua revienta.