Si el agua ya es escasa en el planeta Tierra, en el espacio lo es aún más, por lo que los astronautas de la Estación Espacial Internacional, deben ingeniárselas para obtener el precio líquido vital y para ello lo que tienen que hacer es convertir su propia orina en agua y así contar con los dos litros de agua diarios que necesitan.
Para lo anterior hacen uso del sistema ISS, el cual recicla cerca del 93% de los líquidos que procesa. Es decir, es un destilador que es capaz de simular un campo de gravedad mientras el agua hierve y así separa el vapor y enfriarlo en agua pura, ya que cabe recordar que sin gravedad esto no se puede hacer.
Para mayor detalle mira el video a continuación: