El nuevo dispositivo de la compañía fue lanzado al mercado en Japón en vista del accidente nuclear generado en la central de Fukushima tras el terremoto y tsunami de marzo de 2011.
A través de un botón, los usuarios podrán comprobar la radiación existente en cada lugar en el que se encuentren o que el teléfono mida esos niveles de forma automática constantemente. Además, gracias a esta función los usuarios pueden publicar esa medición realizada en un sitio determinado en las redes sociales acompañada de un mapa de lugar exacto.
El teléfono, resistente al agua y al polvo, cuenta con Android 4.0 IceCream Sandwich, una pantalla LCD de 3,7 pulgadas con resolución de 854×480. Además, incorpora dos cámaras, una trasera de 4 megapíxeles y otra delantera de 0,3 megapíxeles para realizar videollamadas.