El estamento comunitario presentó una acusación formal contra 13 empresas fabricantes de lectores de CD y DVD de pactar los precios en el mercado durante cinco años para poder repartirse los contratos licitados por dos compañías de computadores.
En vista de esta situación, Bruselas entregó un pliego de cargos a las firmas involucradas, las cuales arriesgan una multa equivalente al 10% de su volumen de ventas. Sin embargo, la CE no quiso entregar el nombre las empresas involucradas en el caso.
“La Comisión estima, de forma preliminar, que las empresas han manipulado los procedimientos de adjudicación de contratos durante al menos dos años, lo que constituye una de las infracciones más graves a las reglas de la UE”, ha dicho en un comunicado.
“Este comportamiento, si se confirma, podría haber perjudicado a los clientes que han comprado lectores de discos ópticos fabricados por las empresas implicadas”, agregó.