Un estudio realizado en EEUU indicó que el consumo de ácidos grasos trans no causan un impacto negativo en el nivel de azúcar en la sangre, a pesar del incremento de los niveles de colesterol.
Los científicos apuntaron que el azúcar y la insulina, la hormona que mantiene los niveles de azúcar en la sangre bajo control, son similares y no tienen relación con la cantidad de grasas trans consumidas.
Los investigadores estudiaron a 208 personas, a quienes sometieron a siete diferentes experimentos. Así, en cinco de ellos se controlaron durante varias semanas los niveles de azúcar en sangre, la insulina y el colesterol con una dieta de alto consumo de grasas trans.
Pasadas unas semanas, estas grasas fueron sustituidas por otras como el de palma o el aceite de soja. Junto con ello, se comparó el estado de los individuos que consumían una dieta que incluía las grasas trans frente a otros que lo hacían.
En este sentido, los resultados mostraron que no hubo cambios en el azúcar de la sangre o los niveles de insulina en las personas que consumieron grasas trans, en comparación con las que ingirieron otras grasas.
Sin embargo, los investigadores sí hallaron que durante las semanas que se consumió grasas trans los niveles de colesterol aumentaron.