Las alianzas y “amistades” en el mercado tecnológico son habituales. Está Google con Samsung, que comparten el sistema operativo de dispositivos móviles Android, también está Microsoft con Nokia, quienes en conjunto desarrollan el sistema operativo de Windows para smartphones, y alguna vez estuvo Apple con Google, con la aplicación Google Maps, que fue predeterminada para mapas en los dispositios Apple. Pero hoy eso ya no va más.
Ambos gigantes tecnológicos se encuentran enfrascados en una lucha por dominar en un futuro las aplicaciones de mapas y localización. Y es que parece que con la arremetida de Android, el sistema operativo de Google, Apple se vio vulnerado principalmente en sus ventas y hoy planea dejar fuera a Google Maps como aplicación predeterminada de iOS.
La compañía de Cupertino pretende lanzar su propia aplicación de mapas, con tecnología propia y funcionalidades desarrolladas por Apple. Además, incentivará a los desarrolladores a integrar esta nueva plataforma dentro de sus aplicaciones, como redes sociales y servicios de búsqueda.
Para lograr esto, la manzana ya adquirió tres empresas relevantes de mapas y lanzó una aplicación de geolocalizador, capaz de traducir la longitud y latitud de un teléfono en un punto dentro de un mapa, lo que antes hacían con el geolocalizador de Google.
Con esta nueva aplicación, Apple intenta desbancar a Google Maps como el software de mapas mayor utilizado en sus propios dispositivos, ya que en la actualidad los mapas del buscador son utilizados por más del 90% de propietarios de iPhone en Estados Unidos.
Esta situación resulta algo extraña, si recordamos que el fallecido Steve Jobs mantenía relaciones muy cercanas con Eric Schmidt, quien fuera CEO de Google y que incluso formó parte del directorio de la manzana, mientras era director general del buscador.