Investigadores de la Universidad de Bielefeld descubrieron que los jóvenes que son víctimas de ciberbullying o acoso cibernético sufren más cuando sus compañeros los tienen como objeto de burla por la distribución de material fotográfico.
De acuerdo a una encuesta en línea realizada a 1.881 niños en edad escolar en Alemania, cerca de la mitad de las víctimas se sienten muy angustiados o muy afectados por este tipo de comportamiento.
Un punto focal de la consulta fue el grado de angustia que sienten por la víctima en relación con las diversas formas de acoso cibernético. La encuesta descubrió que las personas afectadas encuentran algunas formas de acoso cibernético más dolorosas que otras.
Por ejemplo, más de la mitad de las víctimas consideran que la publicación de las fotos y videos personales los puede hacer objetos de humillaciones o burla.
Los investigadores apuntaron a estos resultados al hecho de que el impacto de esta forma de acoso cibernético es difícil de controlar, ya que fotos y videos digitales a menudo se puede copiar y distribuir un sinnúmero de veces y por lo tanto está a disposición de un público potencialmente ilimitado.
En contraste, el comportamiento despectivo, insultante, abusivo y amenazante se percibía como muy angustiante sólo para el 25% de los encuestados.
“Esto podría deberse a que esta forma de acoso cibernético puede ser dirigida directamente a la víctima. En este caso, hay relativamente pocos testigos”, dice Peter Sitzer.
La encuesta anónima también dio a los infractores de ciberbullying la oportunidad de hablar, los que declararon cómo habían atacado a sus víctimas por internet o por teléfono móvil.
Los autores del acoso describieron con frecuencia que habían ridiculizado, insultado, otros maltratados o amenazados a sus víctimas. La conducta difamatoria y cibernética también recibió una mención frecuente.
“Nuestros hallazgos subrayan que el ciberacoso no es un asunto trivial, sino un problema grave que exige medidas preventivas”, dice Peter Sitzer.
Más detalles en: Science Daily