La Dirección del Parque Natural Galápagos informó que la especie Chelonidis abingdonii, de la cual se creía que “George” era el último representante, no se ha extinguido, puesto que sus genes sobreviven en 17 tortugas que habitan en el archipiélago.
Los investigadores del organismo indicaron que nueve hembras, tres machos y cinco jóvenes que habitan en el volcán Wolf, en la isla Isabela, comparten su ascendencia.
Con esto, apuntan que es posible que se encuentren más especímenes híbridos e incluso representantes geniunos de Chelonidis abingdonii.
“El descubrimiento marca el primer paso hacia la recuperación de la especie Chelonidis abingdonii, mediante un programa de reproducción y crianza en cautiverio, opción que es evaluada”, explicó la Dirección del Parque.
Con el programa, sus expertos creen poder restablecer “el linaje de las desaparecidas compañeras del Solitario George y la integridad ecológica” de la isla Pinta. El estudio fue realizado por la Dirección del Parque Nacional Galápagos y la Universidad de Yale.
Sus resultados son fruto de la comparación de más de 1.600 muestras de ADN recogidas en 2008 en el volcán Wolf con los genes del “Solitario George” y de especímenes de tortugas de su especie conservados en un museo.
Sus responsables planean ahora una serie de expediciones al lugar para capturar a los 17 individuos cuyas células tienen genes de Pinta y buscar otros híbridos y posibles ejemplares puros.