Las mentes detrás de Angry Birds lanzaron este jueves su nuevo juego de carácter educativo, protagonziado por Alex, un niño que le encanta construir cosas.
El objetivo del juego es resolver una serie de puzzles mediante efecto dominó, es decir, haciendo que unos objetos choquen con otros para moverlos de un lado a otro.
Rovio invirtió parte de su capital en las empresas Snappy Touch y Mistery Coconut, propietarias de los derechos del juego Casey’s Contraptions, que Rovio ha renombrado bajo la denominación de Amazing Alex.
La empresa se hizo mundialmente famosa al desarrollar Angry Birds, un fenómeno de ventas tanto en dispositivos Apple Android y Windows Phone, por lo que sus nuevas versiones se han hecho comunes en el corto tiempo.